EMPANADA GALLEGA

DE PASTORA GARCIA PEREZ



Para la masa:
Poner un cuenco de levadura del tamaño de un quesito (El Caserío), más o menos, con un poco de agua. En otro cuenco una cucharada de mantequilla derretida anteriormente en un cazo en el fuego y echarle un poco de agua fría. Y en otro cuenco batir un huevo.
Echar en un molde, aproximadamente 400 grs. de harina, hacerle un hueco en el centro y echarle sal, la levadura, la mantequilla y el huevo e ir añadiendo harina según haga falta, pero que no quede la masa dura. Dejarla reposar entre 1,5 ó 2 horas, hasta que va aumentando.

Relleno de pescado:
Se hecha crudo con bastante cebolla pasada cortada muy fina con un tomate sin piel y azafrán.
Relleno de calamares:
Cortados a trozos pequeños, pasar por el sartén unos 15 minutos aprox. a continuación echar bastante cebolla y remover todo junto hasta que ésta esté bien pasada.
Relleno de choco:
Pasarlo sobre 45 minutos aprox. En el mínimo de fuego. Aparte se pasa mucha cebolla y luego se junta con el choco como la de calamar.
Relleno de carne:
La carne hay que pasarla en un sartén con ajos.

Antes de echar el sofrito en la empanada es conveniente escurrirlo y una vez extendido en la maza añadir 2 ó 3 cucharadas de aceite antes de taparla.

La masa:
Se estira con un rodillo hasta que esté bien fina, si es la de pescado, se echa la primera capa en una empanadera, previamente cubierta con mantequilla, se estiende la mitad de la cebolla, luego el pescado y se cubre con el resto de la cebolla, a continuación se tapa con la segunda capa de masa y se la pasa un poco de aceite. Calentar el horno a 220º durante 10 minutos aprox. y después hornear la empanada a 175º durante 45 minutos.

MILICIA 1812 - 19/3/2008





Al igual que el 19 de marzo de 1812, la celebración del 196 aniversario de la proclamación de la primera Constitución Española estuvo acompañada por la lluvia.

Tanto, que el minucioso desfile de simulados diputados, Milicia, distinguidos voluntarios y gaditanos de la época que partió del Baluarte de la Candelaria tuvo que suspenderse pasadas las once de la mañana tras llegar a Plaza de España. Allí, con el Monumento a las Cortes de 1812 como telón de fondo, varias autoridades y representantes de la capital participaron en una ofrenda floral.

En pleno aguacero, Teófila Martínez, alcaldesa de Cádiz, dijo que la ciudad "se sabe heredera de la primera constitución española", un texto que proclamó "que la soberanía era de un pueblo que quiso a sus hijos justos y un gobierno capaz de buscar la felicidad de la nación". La Constitución española de 1812 es, dijo ayer la regidora de la ciudad, "la madre de muchas constituciones, propició libertad en muchos pueblos de América y es matrona de la Libertad". Precisamente por ello, 2012 "debe ser el refrendo de la Libertad".

Tras quedar suspendido el desfile a causa de la intensa lluvia, que pretendía regresar al Baluarte pasando antes por Santa Inés, la ofrenda floral a cargo del concejal Juan José Ortíz en el Oratorio de San Felipe resultó "algo deslucida", según sus palabras. Y aunque la lluvia frustró parte del desfile, con lo que no pudo fue con el ánimo de quienes participaron en él.

Resguardados en el Baluarte de la Candelaria, los cerca de 40 participantes entraron en calor con un almuerzo mientras hacían gala de sus conocimientos sobre lo ocurrido en 1812. Los diputados por un día Manuel García y Manuel Bienvenido; el obispo Vicente Cabrera y la aldeana Remedios García, aunque decepcionados por la jornada de lluvia, reconocían que este tipo de actos "tienen gran aceptación en la ciudad. Además, fomenta que los jóvenes se interesen por todo lo que rodeó a la proclamación de la Constitución de 1812".

MILICIA 1812 - 15/3/2008

Liderados por el general Ramón Velázquez, a quien el Ayuntamiento encomendó directamente esta primera escenificación del Cádiz de las Cortes, los miembros de la Milicia Nacional y del grupo de Voluntarios Distinguidos partieron del Baluarte de la Candelaria con destino al Ayuntamiento.


Lo hicieron a paso marcial, con un grupo de seis soldados que marcaban el ritmo a golpe de tambor y acompañados de otros personajes de la época: diputados doceañistas, destacados miembros del clero y ciudadanos del pueblo de Cádiz, entre ellos una nutrida representación de mujeres vestidas de piconeras y que ponían el contrapunto festivo al cerrar el cortejo cantando y palmeando aquello de “Con las bombas que tiran los fanfarrones…”



El grupo atravesó San Antonio y Ancha, llegó a la plaza de San Francisco a través de Sagasta y bajó hacia San Juan de Dios para llegar a las puertas del Ayuntamiento casi media hora antes del horario previsto. La representación concitó el interés de los ciudadanos: unos porque sabían del desfile y lo esperaban en las calles y otros que disfrutaban del buen tiempo y se toparon con una escenificación colorista que fue bien recibida por todos.


Una vez en San Juan de Dios, mientras la tropa descansaba en el centro de la plaza, el general Velázquez entró en el Ayuntamiento para cumplimentar a la autoridad municipal de la ciudad.


Teófila Martínez bajó, pasó revista a la tropa y saludó a los diputados y representantes del pueblo. Todos subieron entonces al salón de plenos, donde se procedió a la entrega de despachos a los milicianos y voluntarios.













Teófila agradeció el esfuerzo de los voluntarios, anunció que se irá aumentando el número de figurantes hasta conseguir en 2012 una gran escenificación y acabó sus palabras con un coreado "¡Viva La Pepa!". Ramón Velázquez, por su parte, reclamó una sede para esta iniciativa.